Las principales urbes
de Brasil tienen una característica común que son los grafitis y pixações
(estilo característico de las pintadas en Brasil). Visiblemente, el arte urbano
le ha otorgado color a las grises ciudades brasileñas a la vez que le ha dado
prestigio a este país por tener a los mejores artistas urbanos del planeta como
lo son Claudio Ethos, Nunca, Cranio, Os Gemeos y Eduardo Kobra entre otros muchos.
No cabe ninguna duda,
que Sao Paulo es la capital del arte urbano en este lado del mundo, además de
ser una ciudad privilegiada porque de ella vienen dos de los mejores exponente
del arte callejero de Brasil, conquistado al mundo con sus grafitis, asimismo, los
museos y galerías se disputan sus obras, estos artistas no son otros que Os Gemeos y Eduardo Kobra. En el caso
particular de Kobra conquistó su propio espacio en el escenario global con un
trabajo mural donde resalta la ilustración en su mayoría de rostros o cuerpos fondeados
por una colorida geometría dejado esta marca en 40 países de los cinco
continentes pintado más de 500 murales.
Eduardo Kobra quien a
menudo exaltó las banderas de los distintos movimientos sociales por las calles
de Brasil a través de sus murales haciendo hincapié en temas álgidos como el
racismo, la segregación, prejuicios, la paz, la migración, los refugiados, las
minorías, memoria e historia. Estas temáticas que son coloridas reflexiones
plasmadas en los muros paulistas no solo encarcelaron en un par de ocasiones
sino también le otorgaron a Kobra reconocimiento a nivel mundial, catalogándolo
en este momento como uno de los artistas con más proyección internacional de
Brasil. Actualmente, en la ciudad de Nueva York este artista ha emprendido una
nuevo proyecto "museo al aire libre" que entre otras cosas busca
homenajear a esas figuras de la música y la cultura Pop, sin dejar atrás las
causas y las reivindicaciones sociales.
En proyecto del museo
al aire libre de Eduardo Kobra, plantea una producción de tres años donde se
estima la realización de 28 murales que serán repartidos por muros y rascacielos
en diversos puntos de la ciudad llamada capital del mundo. Este proyecto que
capturara la esencia del trabajo y la visión de Kobra se une a otro proyecto
llevado a cabo en esa ciudad como es el caso del proyecto “Walking New York”
del fotógrafo y artista urbano francés JR, quien realizó 14 gigantografías, que
por su tratamiento se apropiaron de las calles y del asombro de los transeúntes
de la gran manzana.
Los murales de Kobra
son obras únicas, plenas de vida y cargada de colores. Son propuestas
emocionales donde la mayoría de sus protagonistas son personajes oriundos de la
ciudad o el país donde desarrolla el graffiti, pero al ser Nueva York el
ombligo del mundo, se permitió la licencia de traer figuras mundiales como la
mexicana Frida Kahlo, el alemán Albert Einstein y la inglesa Amy Winehouse, como
también le dio espacio a esos artistas que este brasileño admira y que hicieron
vida en esta ciudad como Jean Michel Basquiat, Andy Warhol, Roy Lichtenstein y
Keith Haring. Desde luego, podemos encontrar un colorido homenaje al Club de
los 27 donde ilustra a las estrellas del rock que murieron trágicamente a los
27 años como Morrison, Joplin, Cobain, Hendrix. Posiblemente, el homenaje más
reflexivo es el que le hace al rey de Pop, en este mural, Michael Jackson es
retratado en dos fases de su vida, es un homenaje dividido en dos mitades, una
que lo representa con 5 años con la frescura de su niñez y un peinado afro,
mientras que la otra mitad, lo muestra de adulto con un semblante grave y lleno
de cambios estéticos. Cabe destacar, el fondo blanco de un rostro y el fondo negro
del otro, nos da muchas lecturas de las desconexiones que en su momento nos mostró
este trascendental personaje de nuestra cultura pop.
No pasará mucho tiempo
para que la ciudad de Nueva York nos devele un nuevo mural llenos de color,
historia y nostalgia de Eduardo Kobra.
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